Diario de Jonathan Harker, 1 de agosto de 2012
Queridísima Mina, menudo calor de locos. Creía que Moonlight Falls sería una ciudad inquietante llena de calles adoquinadas, húmeda y neblinosa, poblada por misteriosas viejas encapuchadas portando candiles de una esquina a otra, en horas intempestivas. Pero esto parece Nueva Jersey, demonios. Un barrio residencial de casas perfectamente ajardinadas, asfalto tan liso y pulcro que parece recién hecho, y todo mucho más convencional de lo esperado.
La casa de verano que me ha prestado el Conde Drácula hasta que vuelva de su viaje está bastante bien. La decoración gótica ya sabes que no es mi rollo, y a veces tengo la sensación de que estoy viviendo en un plató de la Hammer, pero me ha gustado eso de que tenga una guarida secreta. Se activa tirando de un libro de la biblioteca. Crepúsculo, creo que se titula, o algo así. Cuando bajas sus escaleras puedes ver una estantería con un libro de alquimia y un montón de elixires con etiquetas como "Zombificar", "Convertir en oro" o "Adelgazar". Creo que te regalaré uno de estos tarritos. Adivina cuál.
La gente un poco rara, eso sí. He visto pasar por delante del jardín a un grupo de caballeros muy peludos, que aullaban a la luna, gruñían y se rascaban mucho. Iban diciendo que se iban a cazar y de golpe han empezado a pelearse. No parecían muy estables mentalmente. Creo que mejor seguiré bebiendo agua embotellada.
0 comentarios:
Publicar un comentario